Un paseo de aventura por el Pueblo Mágico se convirtió en una pesadilla para una turista regiomontana y un trabajador del lugar. La joven, buscando adrenalina en el famoso columpio extremo, vivió momentos de terror al quedar suspendida del arnés de seguridad, mientras que un empleado resultó con un fuerte golpe en la cabeza tras caer de la plataforma al preparar la atracción.

El incidente, ocurrido este fin de semana, ha puesto en evidencia las precarias condiciones de seguridad de esta atracción turística. Testigos aseguran que la falta de mantenimiento y la nula supervisión por parte del personal fueron los principales causantes de este lamentable suceso.

Denunciaron que en el lugar no existe un servicio médico adecuado para atender este tipo de emergencias, lo que pone en riesgo la vida de turistas y trabajadores, tampoco existe personal que esté pendiente del mantenimiento o seguridad de las estructuras, que en su mayoría están suspendidas sobre los voladeros de los cerros.

Tras lo ocurrido, no se presentó ninguna autoridad y la atracción siguió en funciones, lo que genera un clima de indiganción e incertidumbre por la seguridad de trabajadores y turistas.

Por EditorWeb